Domingo 26 de septiembre 2021 “El Sacerdocio Aarónico Fue Figura Del Perfecto Sacerdocio De Cristo”

    Lección: Levítico Cap. 9, versículos 7 al 14. Y dijo Moisés a Aarón: Acércate al altar, y haz tu expiación y tu holocausto, y haz la reconciliación por ti y por el pueblo; haz también la ofrenda del pueblo, y haz la reconciliación por ellos, como ha mandado Jehová. Entonces se acercó Aarón al altar y degolló el becerro de la expiación que era por él. Y los hijos de Aarón le trajeron la sangre; y él mojó su dedo en la sangre, y puso de ella sobre los cuernos del altar, y derramó el resto de la sangre al pie del altar. E hizo arder sobre el altar la grosura con los riñones y la grosura del hígado de la expiación, como Jehová lo había mandado a Moisés. Mas la carne y la piel las quemó al fuego fuera del campamento. Degolló asimismo el holocausto, y los hijos de Aarón le presentaron la sangre, la cual roció él alrededor sobre el altar. Después le presentaron el holocausto pieza por pieza, y la cabeza; y lo hizo quemar sobre el altar. Luego lavó los intestinos y las piernas, y los quemó sobre el holocausto en el altar. 

    Comentario general del contexto Bíblico:   a. Se ofrecen sacrificios (9:7–14)

   La preparación consistía principalmente en la ofrenda de sacrificios y Aarón oficiando en el altar por primera vez. Antes de que Aarón pudiera actuar de representante del pueblo, tenía que ofrecer sacrificios para él mismo (vv. 8–14). Una vez más, debe confesar su propio pecado e incompetencia ante Dios y ante el pueblo.

   Se podría pensar que después de una semana de sacrificios presentados para él, no harían falta más sacrificios aún. Algunos dicen que, en vista de esta repetición sin fin, Aarón podría haberse sorprendido de la incapacidad que tenía el sistema de sacrificios para tratar eficazmente el pecado. Quizás, pero esta visión no tiene en cuenta que para Aarón era su primer día de oficio: un día para el que se había estado preparando durante mucho tiempo. Sería raro que se cansara tan pronto de ofrecer sacrificios. También es una visión un tanto anacrónica y anticipa un entendimiento cristiano de la deficiencia del sacrificio de animales como medio de expiación. Una interpretación más verdadera de la situación es que la expiación diaria del pecado —tal y como indica la ofrenda por el pecado— y la consagración diaria a Dios —tal y como simboliza el holocausto— se necesitaban entonces, y aún se necesitan hoy en día por parte de los siervos de Dios.

   Los procedimientos que se siguieron en el octavo día difieren en lo mínimo de los procedimientos que se seguían normalmente. Por ejemplo, la sangre de las ofrendas por el pecado no se rocía en el velo ni se pone en los cuernos del altar de incienso, tal y como se establece en 4:6–7, 17, sino que se pone en los cuernos del altar exterior y se derrama al pie del altar (vv. 9, 15). Esto quizás ocurra porque el sistema cúltico no estaba aun completamente operativo y, por lo tanto, el pecado no había tenido la oportunidad de profanar el santuario y manchar el velo que separaba el lugar santo del lugar santísimo. Pero, seguramente, las rutinas normales se habían dejado a un lado porque este día era aún día especial, nada que ver con un día corriente.

   Después de ofrecer sus propios sacrificios, Aarón ofrece ofrendas por el pecado, holocaustos, de cereal y de paz por el pueblo. Solamente faltó la ofrenda por la culpa, porque esta se reservaba para ocasiones en las que se trataban pecados específicos y estos no tenían ninguna relevancia en este día especial de celebración. Aparte de esto, estaban presentes todos los elementos de la adoración de Israel y se utilizaron para preparar la venida del Señor. El orden de los sacrificios estaba planeado cuidadosamente y no era aleatorio. Demuestra el único orden que es aceptable cuando nos acerquemos a Dios. Primero se confiesa el pecado; después se renueva la consagración; se ofrecen regalos después de eso; y, finalmente, como resultado se disfruta de la comunión con los demás. Debemos señalar que los sacrificios no eran medios en sí mismos. El objetivo de la adoración de Israel no era que pudieran llevar a cabo un teatro religioso, sino que pudieran encontrarse con Dios mismo. Pero era sólo por la presentación de ofrendas de expiación y adoración que un pueblo pecador podía encontrarse con un Dios santo.

Texto: “Pero ahora tanto mejor ministerio es el suyo, cuanto es mediador de un mejor pacto, establecido sobre mejores promesas”. (Hebreos 8:6). 

   Comentario del texto áureo: 6. Pero el ministerio que Jesús ha recibido es tan superior al de ellos como el pacto del cual él es mediador es superior al antiguo, y está fundado en mejores promesas.

   Este versículo es en realidad una continuación de 8:4, con el pronombre él (vale decir, Jesús) como sujeto de la oración. Aunque el escritor de Hebreos hace contrastar a Jesús con los sacerdotes levíticos, el énfasis primordial de 8:6 es la diferencia que hay entre los pactos y no la diferencia entre los ministerios. El escritor introduce, de manera algo abrupta, el concepto del pacto que había mencionado en 7:22. Ahora él está listo para explicar las implicaciones del nuevo pacto, que es superior al antiguo. Y él muestra que Cristo es el mediador de este nuevo pacto.

   En este versículo, la palabra superior aparece dos veces: el ministerio que Jesús ha obtenido es superior al de los sacerdotes, y el nuevo pacto es superior al antiguo.

   ¿Cuál es el ministerio que Cristo ha recibido? La palabra ministerio está relacionada con el trabajo en el tabernáculo o santuario. Si Jesús hubiera cumplido simplemente con las responsabilidades del sacerdocio aarónico con su sacrifico personal, su labor estaría incompleta. Jesús cumplió con las obligaciones del sacerdocio levítico e introdujo la era del sumo sacerdocio según el orden de Melquisedec. El viejo sistema ha cedido su lugar al nuevo, y en ese nuevo pacto Jesús se ha convertido en el mediador.

   En los tiempos del Antiguo Testamento, los sumo sacerdotes servían de mediadores entre Dios y el hombre. Eran mediadores en base al antiguo pacto que Dios había hecho con su pueblo, pero este pacto había quedado obsolete (8:13) ya que el nuevo había tomado su lugar. En los versículos subsiguientes el escritor explica por qué el nuevo pacto es superior al antiguo.

   Sin embargo, el escritor da una razón previa acerca de por qué el nuevo pacto es mejor que el antiguo. Dice él: “está fundado en mejores promesas”. Por implicación llegamos a la conclusión de que las promesas hechas por Dios a su pueblo en los tiempos antiguos eran inadecuadas. Las promesas del antiguo pacto marchaban junto con la ley de Moisés; las promesas del nuevo pacto incluyen la incorporación de la ley de Dios a la mente de su pueblo y escrita en los corazones del mismo, la enseñanza del conocimiento de Dios, y el perdón del pecado (8:10–12).

   Comentario 2: (8:6) Mediador ▬ Nuevo pacto: El nuevo pacto lo establece un mediador perfecto. La palabra “mediador (mesites) significa alguien que intercede entre dos partes y las une. El mediador es un negociador, un intermediario, un árbitro. Este es Jesucristo, pero hay una diferencia única y distintiva entre Jesucristo y los mediadores humanos. Jesucristo es el mediador perfecto. Él es el Mediador elegido por Dios mismo para interceder entre Dios y el hombre. Jesucristo fue elegido para ser el mediador porque Él es perfecto. El presenta los términos del pacto perfectamente. Él no miente, engaña, tergiversa, cambia, añade, resta, ni mal representa los términos del pacto de Dios. Él anuncia y proclama la verdad de los términos claramente y perfectamente.

   “Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre” (1 Ti. 2:5).

   “Pero ahora tanto mejor ministerio es el suyo, cuanto es mediador de un mejor pacto, establecido sobre mejores promesas” (He. 8:6).

   “Así que, por eso es mediador de un nuevo pacto, para que interviniendo muerte para la remisión de las transgresiones que había bajo el primer pacto, los llamados reciban la promesa de la herencia eterna” (He. 9:15).

   “Porque no entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios” (He. 9:24).

   “a Jesús el Mediador del nuevo pacto, y a la sangre rociada que habla mejor que la de Abel” (He. 12:24).

   “Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo” (1 Jn. 2:1).

  Comentario 3: (8: 6) Pacto ▬ Nuevo: El nuevo pacto se establece sobre mejores promesas. Nota: El nuevo pacto de por sí es un mejor pacto que el viejo pacto por las mejores promesas. ¿Cuál es el viejo pacto? Es el pacto de la ley que Dios prometió que Él aceptaría, bendeciría, y se relacionaría más con el hombre si el hombre cumpliera la ley. El hombre aceptó las condiciones e hizo un voto de obedecer los términos del pacto de Dios o de la ley (Éx. 24: 1-8; cp. Jer. 7:23). Pero el hombre descubrió una realidad terrible, la ley no era lo suficientemente cabal ni completa. No satisfacía suficientemente sus necesidades. El hombre descubrió cuatro debilidades terribles.

   => La ley disponía que Dios era santo y que esperaba que su pueblo llevara una vida santa. Pero la ley no daba el poder interno y la fuerza para obedecer a Dios.

   => La ley disponía que el hombre podía ganar la aceptación de Dios. Pero la ley no proveía el poder y esfuerzo para ganar la aceptación ni para heredar la vida eterna.

   => La ley disponía que Dios era el Gobernador Majestuoso y Soberano del universo, el gran Legislador. Pero la ley no decía nada sobre un conocimiento y relación personal con Dios.

   => La ley disponía que Dios era estricto y severo, justo y santo. Pero la ley no decía nada acerca del amor y la misericordia de Dios ni acerca de su perdón.

   Aquí es donde el nuevo pacto supera al viejo pacto. El nuevo pacto está establecido sobre promesas mucho mejores. Cada uno de estos defectos del viejo pacto se subsanaron en las promesas del nuevo pacto. En el nuevo pacto, una persona halla la promesa gloriosa…

  • de poder y fuerza en el hombre interno (v. l0).
  • de aceptación personal de Dios que significa vida eterna (v. 10).
  • de un conocimiento y relación personal con Dios (v. 11).
  • de amor y misericordia de Dios y de su perdón (v. 12).

   “(pues nada perfeccionó la ley), y de la introducción de una mejor esperanza, por la cual nos acercamos a Dios” (He. 7:19).

   “Pero ahora tanto mejor ministerio es el suyo, cuanto es mediador de un mejor pacto, establecido sobre mejores promesas” (He. 8:6).

   “Fue, pues, necesario que las figuras de las cosas celestiales fuesen purificadas así; pero las cosas celestiales mismas, con mejores sacrificios que estos” (He 9:23).

1er Titulo: Orden de realizar la expiación, para obtener la reconciliación. Versíc. 7. Y dijo Moisés a Aarón: Acércate al altar, y haz tu expiación y tu holocausto, y haz la reconciliación por ti y por el pueblo; haz también la ofrenda del pueblo, y haz la reconciliación por ellos, como ha mandado Jehová. (Léase Hebreos 5:1 al 3. Porque todo sumo sacerdote tomado de entre los hombres es constituido a favor de los hombres en lo que a Dios se refiere, para que presente ofrendas y sacrificios por los pecados; para que se muestre paciente con los ignorantes y extraviados, puesto que él también está rodeado de debilidad; y por causa de ella debe ofrecer por los pecados, tanto por sí mismo como también por el pueblo.).

   Comentario del v. 7: ▬a. Haz tu expiación y tu holocausto, y haz la reconciliación por ti y por el pueblo: Aarón tuvo que ocuparse primero de su propio pecado, y solo entonces pudo funcionar verdaderamente como sacerdote, listo para servir a los demás.

   ▬ b. Haz la reconciliación por ellos, como ha mandado Jehová: El sacerdocio de Aarón existía para la gloria de Dios y para el beneficio del pueblo, no para su propio beneficio personal. El oficio de sumo sacerdote era de gran autoridad, pero también de gran responsabilidad.

  ¿Porque Aarón tuvo que presentar un becerro de la vacada?: y dijo a Aarón: Toma de la vacada un becerro para expiación, y un carnero para holocausto, sin defecto, y ofrécelos delante de Jehová. (aquí por primera vez se ordena un becerro de vaca para el sacrificio y solo lo debe ofrecer Aarón; Los animales de este sacrificio incluyen el becerro, que no está incluido en las ofrendas anteriores. Una tradición judía dice que es una referencia al becerro de oro que Aarón hizo para el pueblo en Exodo 32:4–6. Note que el v. 7 dice que este becerro es la expiación por ti y por el pueblo. Es decir, la expiación por el pecado que ellos hicieron juntos en el desierto.  Y la gloria de Jehovah se os aparecerá… es la promesa de que la bendición de Jehovah siempre acompaña a los que son fieles a sus mandatos.)

   ▬ a. Toma de la vacada un becerro para expiación: Como parte de la ceremonia de consagración, Aarón y sus hijos vivían una semana entera en el tabernáculo de reunión. Sin embargo, todavía tenían pecados que expiar durante esa semana. La ceremonia de consagración no hacía perfectos a Aarón y a sus hijos. Durante los siete días de estar sentado en el tabernáculo él añadió más pecados a su cuenta, los cuales tenían que ser limpiados.

-1. A través de la repetición de los sacrificios, Dios también quería mostrar que por muy útiles que fueran los sacrificios de animales, estos no estaban completos y no podían poner fin al pecado. Solo el sacrificio perfecto del Mesías venidero podría hacer eso.

-2. Algunos sugieren (como Trapp y Clarke) que había una razón específica para esta ofrenda particular de un becerro: responder por el pecado del becerro de oro que Aarón permitió (Éxodo 32). «Y para los judíos esto tiene el objetivo de expiar su pecado en cuanto al asunto del becerro de oro. Esto es muy probable, ya que aún no se había hecho una expiación formal por esa transgresión». (Clarke)

   ▬ b. Y un carnero para holocausto: Aunque Aarón hubiera pasado la semana anterior en dedicación especial delante de Jehová, todavía había más para dar. Aunque esta era una importante experiencia de dedicación, la idea de la consagración tenía que ser «continua» en la vida de Aarón y todos los sacerdotes de Dios.

   Nota: El octavo día de Sucot representa un nuevo inicio.  Proféticamente representa el tiempo que vendrá luego del milenio mesiánico, con una tierra nueva y cielos nuevos.  Es un nuevo inicio en la relación del hombre con Dios, luego de su completa redención y restauración.

   Comentario: (5: 1-3) Sumo sacerdote: Había cinco requisitos para que un hombre fuera sumo sacerdote. Note cuán claramente se describen, y note que estos requisitos se aplican a todos los sacerdotes que se “escogen de entre los hombres”. Se aplican a todas las generaciones de los hombres. Toda persona que sirve a Dios en el ministerio necesita tener en cuenta estos requisitos:

   [1]. El sumo sacerdote debe ser nombrado por Dios para representar a los hombres ante Dios. Esa es su función, la razón misma por la que sirve como sumo sacerdote.

=> Se escoge de entre los hombres. Es un hombre que conoce y comprende lo que es ser hombre. Por eso él sabe cómo presentar el caso del hombre ante Dios.

=> Representa al hombre en las cosas de Dios. Guía a los hombres en la oración, adoración, justicia, moralidad, testimonio, y en el estudio de las cosas espirituales.

=> Es ordenado y nombrado por Dios. No escoge el sacerdocio como un medio de sustento o servicio benevolente y social. Es sacerdote porque Dios lo llamó a que sirviera a las personas en las cosas de Dios.

   [2]. El sumo sacerdote debe presentar ofrendas y sacrificios por los pecados. Guía a las personas a presentar ofrendas y regalos al Señor, la ofrenda de la vida de cada una de ellas y sus posesiones. Pero tiene una función significativa: “Presentar el sacrificio por los pecados”. A menos que se perdonen los pecados del hombre, este no puede ser aceptado ante Dios, porque ningún hombre puede borrar sus propios pecados. Por lo tanto, tiene que haber una sustitución, algún sacrificio hecho que pueda ocupar el lugar del pecador y soportar por él el juicio del pecado. Esto, claro está, se refiere a los animales que se sacrificaban para la expiación del pecado en el Antiguo Testamento. El sacrificio animal es también una señal o símbolo que reflejó lo que Jesucristo haría por nosotros: “Convertirse en el cordero de Dios, el sacrificio por nuestros pecados”. Sucede lo siguiente: El sumo sacerdote era la persona que presentaba el sacrificio por los pecados del hombre.

   [3]. El sumo sacerdote debe ser capaz de lidiar con los hombres de un modo compasivo. Note que los hombres se incluyen en una de dos clasificaciones:

=> Los ignorantes: Aquellos que han pecado y no lo sabían; aquellos que son culpables de pecado por ignorancia.

=> Aquellos que deliberadamente se han apartado del camino: Aquellos que pecan intencionalmente, sabiendo que están pecando.

   El sumo sacerdote debe recordar que él también es culpable de padecimientos, debilidades, y fracasos. Por ende, él debe ser compasivo con todos los hombres, no importan sus pecados ni sus defectos. Porque él es como son ellos: “Un hombre, siempre débil y carente de la bondad perfecta de Dios”.

   [4]. El sumo sacerdote debe presentar los sacrificios por sus propios pecados. Él es tan culpable de pecado y carente de la gloria de Dios como las demás personas. Por consiguiente, primero debe hacer sacrificios por sus propios pecados antes de hacer sacrificios por los pecados de las demás personas.

   [5]. El sumo sacerdote debe ser nombrado por Dios y no por sí mismo. Ningún hombre debe tomarse el honor de ser sacerdote por sí mismo; será sacerdote solo si Dios lo ha llamado y constituido para ser sacerdote. Ninguna persona debe entrar en el ministerio sacerdotal porque lo decida como profesión, como un medio para ganarse la vida, o como un medio para servir a la humanidad. Dios y solo Dios llaman a aquellos que le servirán. Solo aquellos a quienes Dios llama pueden servirlo en verdad y desempeñar las verdaderas funciones del sacerdocio.

   “No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé” (Jn. 15:16).

   “El Señor le dijo: Ve, porque instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel” (Hch. 9:15).

   “Pero levántate, y ponte sobre tus pies; porque para esto he aparecido a ti, para ponerte por ministro y testigo de las cosas que has visto, y de aquellas en que me apareceré a ti” (Hch. 26:16).

   “Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios” (2 Co. 5:20).

   “Doy gracias al que me fortaleció, a Cristo Jesús nuestro Señor, porque me tuvo por fiel, poniéndome en el ministerio” (1 Ti. 1:12).

   “Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí” (Is. 6:8).

2° Titulo: Aaron purifica el altar con la sangre para ofrecer la grosura del sacrificio. Versíc. 8 al 11. Entonces se acercó Aarón al altar y degolló el becerro de la expiación que era por él. Y los hijos de Aarón le trajeron la sangre; y él mojó su dedo en la sangre, y puso de ella sobre los cuernos del altar, y derramó el resto de la sangre al pie del altar. E hizo arder sobre el altar la grosura con los riñones y la grosura del hígado de la expiación, como Jehová lo había mandado a Moisés. Mas la carne y la piel las quemó al fuego fuera del campamento. (Léase Hebreos 9:22. Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión.).

   Comentario: 9:8–14. Auxiliado por sus hijos (quienes habían asumido la función de adoradores ordinarios según el ritual del sacrificio), Aarón ofreció un becerro como ofrenda de la expiación … por él. Debido a que Aarón había pecado previamente, haciéndose un becerro de oro (Éx. 32), es irónico que en este punto él ofreciera como su primera ofrenda por el pecado, un becerro, como para expiar dicho pecado. El ritual sigue al prescrito en Levítico 4:3–12, excepto porque la sangre fue untada de nuevo (cf. 8:15) sobre los cuernos del altar del holocausto en lugar del altar del incienso. De la misma manera, Aarón ofreció su holocausto (cf. 8:18–21).

    Comentario: (Hebreos 9: 22) Nuevo pacto ▬ Jesucristo, sangre de: Argumento número dos: La institución del viejo pacto demuestra que todas las cosas son limpiadas por medio de sangre. Esto se ve claramente cuando Moisés instituyó el viejo pacto (cp. Éx. 24:3-8, fundamentalmente 6-8). Después que Dios le dio la ley a Moisés, Moisés se la transmitió al pueblo. Luego realizó una ofrenda de sacrificio al Señor. Él tomó la sangre del animal y la roció sobre el libro del pacto y el pueblo. Este era un servicio de dedicación, un servicio de conmemoración de la institución del primer pacto de Dios, y note cómo se instituía: “Por medio de sangre, por medio del derramamiento de la sangre de Lm sacrificio”. Note también lo que Moisés dice en el v. 20.

   “Esta es la sangre del pacto que Dios os ha mandado” (v. 20).

   Pero este no es el único ejemplo con que contamos. Moisés también realizó un servicio de dedicación cuando se terminó el tabernáculo, y roció con sangre el tabernáculo con todo el mobiliario (v. 21).

   ¿Cuál es la importancia de este argumento?

   “Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión” (v. 22).

   Bajo el pacto y la ley, casi todas las cosas se purgaban y limpiaban por medio de sangre. De hecho, sin el derramamiento de sangre no había limpieza ni perdón. Así sucedía en todo el reino de la ley, desde el momento de la institución de la ley hasta la actualidad. Porque los hombres siempre han sentido una sensación de fracaso, de carencia, de imperfección. Han reconocido una verdad aterradora: Tenían que pagar por sus pecados o de lo contrario alguien 0 algo tenía que ocupar su lugar y ser sacrificado por ellos. Por consiguiente, el hombre constantemente ha realizado sacrificios por sus pecados con el fin de volverse aceptos ante Dios. Siempre ha presentido y sabido que “sin derramamiento de sangre no hay remisión”, no hay limpieza ni perdón.

   Este es el argumento, la prueba de que Jesucristo es el mediador del nuevo pacto de Dios con el hombre. Jesucristo derramó su sangre. Él murió por el hombre. Él ha pagado el castigo por los pecados del hombre. Él ha instituido y puesto en vigor el nuevo pacto de Dios con el hombre

   “porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados” (Mt. 26:28).

   “Pues mucho más, estando ya justificados en su sangre, por él seremos salvos de la ira” (Ro. 5:9).

   “¿cuánto más la sangre de Cristo, el cual mediante el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, limpiará vuestras conciencias de obras muertas para que sirváis al Dios vivo?” (He. 9:14).

   “Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión” (He. 9:22).

   “añade:  Y nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones. Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado. Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el Lugar santísimo por la sangre de Jesucristo, por el camino nuevo y vivo que él nos abrió a través del velo, esto es, de su carne, y teniendo un gran sacerdote sobre la casa de Dios, acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura” (He. 10:17-22).

   “sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación” (1 P. 1:18-19).

   “pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado” (1 Jn. 1:7).

   “y de Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los muertos, y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su sangre” (Ap. 1:5).

3er Titulo: Hecha la expiación, Aaron presenta el holocausto completo, agradable a Dios. Versíc. 12 al 14. Degolló asimismo el holocausto, y los hijos de Aarón le presentaron la sangre, la cual roció él alrededor sobre el altar. Después le presentaron el holocausto pieza por pieza, y la cabeza; y lo hizo quemar sobre el altar. Luego lavó los intestinos y las piernas, y los quemó sobre el holocausto en el altar. (Léase Génesis 22: 13. Entonces alzó Abraham sus ojos y miró, y he aquí a sus espaldas un carnero trabado en un zarzal por sus cuernos; y fue Abraham y tomó el carnero, y lo ofreció en holocausto en lugar de su hijo; ▬ Levítico 16:6. Y hará traer Aarón el becerro de la expiación que es suyo, y hará la reconciliación por sí y por su casa.).

Comentario 1: Dios proveyó un sacrificio sustituto. Dios le dio a Abraham un cordero para que lo ofreciera como sustituto de Isaac (Gé. 22:13).

   Abraham llamó el monte Moriah Jehová Jireh: “Jehová Proveerá”. Dios proveyó un sacrificio sustituto a Abraham; Dios ha provisto un sacrificio sustituto para nosotros en el Señor Jesucristo (v. 13 y 14)

   Pensamiento: la ofrenda de Abraham de su hijo Isaac es una ilustración de la ofrenda de Dios de su hijo, el Señor Jesucristo, como sacrificio por el hombre. El sacrificio de Isaac es un tipo ▬un símbolo, una ilustración, una profecía▬ del sacrificio de Cristo en el Calvario, el sacrificio del propio Hijo de Dios, El Señor Jesucristo, por los pecados del mundo.

   Comentario 2. Preparación de los sacrificios: Aarón no sólo tenía que prepararse él mismo sino también tenía que preparar los materiales que hacían falta para las ceremonias. Había que reunir cinco animales sin defecto en total, preparados para su parte en los sacrificios. Se necesitaban dos carneros (uno para su holocausto y otro para ofrecerlo por el pueblo), un novillo para su propia ofrenda por el pecado y dos machos cabríos (uno para sacrificarlo como ofrenda por el pecado del pueblo y otro para dejarlo en libertad en un lugar solitario del desierto).

   Antes de sacrificar a los animales había una tarea adicional que solamente tenía lugar el día de la expiación. Y echara suertes Aaron sobre los dos machos cabríos, una suerte por el Señor, y otra suerte para el macho cabrío expiatorio (v. 8). Al principio, los dos machos cabríos no se distinguían entre sí. Los dos se consagraban al Señor para tomar parte en la tarea de asegurar la purificación de Israel, pero el que había de ser sacrificado y el que había de escapar salvando su vida se dejaba que los escogiera el Señor, echando suertes.

   Se dice que la cabra que se escogía como macho cabrío expiatorio era para Azazel (Reina Valera, cf.), lo cual ha generado una gran cantidad de debate. Hay varias interpretaciones para este término vago. Podría referirse a un lugar inaccesible en el desierto, tal y como se concibe en el versículo 22. O simplemente podía ser una forma de decir que este es el “macho cabrío que se va”. El término hebreo es casi con toda seguridad una palabra compuesta de ‘ēz (cabra) y ’āzal (“ir” o “ser conducido hacia fuera”). O podría referirse al líder demoníaco del desierto, un demonio del desierto, o quizás el líder de los ángeles caídos. Un argumento a favor de esto es la simetría que existiría en la frase, entre “un macho cabrío para el Señor” y “un macho cabrío para Azazel”, y así es como los intérpretes judíos después lo han entendido. Pero hay ciertas reservas acerca de esta interpretación y tendremos razón al dudar de él para que no lleve a malinterpretar seriamente lo que se está diciendo. El macho cabrío que se envía al desierto no se está enviando como sacrificio o pago para el demonio. Dios no le debe nada a los seres demoníacos y el Antiguo Testamento no sugiere de ninguna manera que deben ser aplacados.

Amén, Para La Honra Y Gloria De Dios.

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Una respuesta a “Domingo 26 de septiembre 2021 “El Sacerdocio Aarónico Fue Figura Del Perfecto Sacerdocio De Cristo”

  1. mariacubillos

    GRACIAS MI HERMANO NO PUDE AGRADECERLE LA SEMANA PASADA YA QUE ESTABA OCUPADA ,PERO AHORA ME DISCULPO POR ESO, AHORA FELIZ CON LA AYUDA DE LA ESCUELA DOMINICAL ,Y ESPERANDO LA AYUDA PARA LAS DORCAS YA QUE POR VOLUNTAD DE MI DIOS TENGO EL TEMA Y 2 TITULOS DIOS LE BENDIGA EN GRAN MANERA SALUDOS FRATERNALES DESDE VALPARAISO.
    ________________________________
    De: Estudio Bíblico Tiquico
    Enviado: miércoles, 22 de septiembre de 2021 12:26
    Para: maritte_45@hotmail.com
    Asunto: [New post] Domingo 26 de septiembre 2021 “El Sacerdocio Aarónico Fue Figura Del Perfecto Sacerdocio De Cristo”

    Estudio Bíblico I.E.P. Roberto Saldías Roa posted: ” Lección: Levítico Cap. 9, versículos 7 al 14. Y dijo Moisés a Aarón: Acércate al altar, y haz tu expiación y tu holocausto, y haz la reconciliación por ti y por el pueblo; haz también la ofrenda del pueblo, y haz la reconciliación por ellos, como ha “

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